La
Musicoterapia tiene como objetivo desarrollar potenciales y/o restaurar las funciones del paciente mediante el uso de la música o elementos musicales (sonido, ritmo, melodía y armonía), de manera tal que éste pueda lograr una mejor integración tanto consigo mismo, como de manera interpersonal, y consecuentemente, una mejor calidad de vida a través de la prevención, rehabilitación y tratamiento.
La Musicoterapia permite evaluar el bienestar emocional, la salud física, la interacción social, las habilidades comunicacionales y la capacidad cognitiva de los pacientes en proceso de rehabilitación de las drogodependencias. Dicha evaluación es considerada a través de procedimientos específicos, como la improvisación musical clínica, la imaginería musical receptiva, la creación clínica de canciones y la técnica vocal terapéutica, entre otros. En ese proceso, el
Musicoterapeuta promueve y registra cambios expresivos, receptivos y relacionales que dan cuenta de la evolución del tratamiento. En las sesiones de Musicoterapia, se emplean instrumentos musicales, música editada, grabaciones, sonidos corporales, la voz y otros materiales sonoros.
Así, por ejemplo, especialistas del Sistema de Salud Cubano aplican procedimientos de la medicina tradicional y complementaria para el tratamiento del problema de la drogadicción; en efecto, la Clínica Internacional El Quinqué, en la oriental provincia de Holguín, utiliza precisamente esos métodos para lograr un menor empleo de fármacos de origen químico. Entre los procedimientos de mayor empleo destacan los ejercicios de Musicoterapia con relajación.
Esa iniciativa permitió en el último año reducir ostensiblemente la cantidad de fármacos utilizados en el proceso de desintoxicación, en un 80% menos de los que se usaban inicialmente. A manera de ejemplo, los expertos destacaron que de 88 personas incluidas en la rehabilitación, sólo 10 necesitaron medicamentos en la última etapa de tratamiento. La Clínica Internacional El Quinqué, inaugurada en 1991, brinda atención a cerca de un centenar de personas cada año, afectadas por el consumo de alcohol, crack, heroína, cocaína y marihuana, entre otras drogas.
Los Trastornos del Lenguaje encuentran en la Musicoterapia un medio de rehabilitación que incide tanto desde el punto de vista puramente fisiológico (como puede ser la ejercitación de la voz, movimiento, etc.), como desde la perspectiva emocional e intelectual que proporciona un desarrollo afectivo y cognoscitivo. La dinámica planteada de modelos melódicos y rítmicos influye en el desarrollo del habla intencional, donde el niño puede considerar más simple y atractivo el invento o la ejecución de una melodía, que la expresión simple de una palabra o de una frase, representando un medio de expresión placentero y de gran valor emocional.
De esta manera, con la Intervención Musicoterapéutica no sólo se proporciona al niño un modo de resolver aquellos problemas comunicativos derivados de su trastorno de lenguaje, sino que además, se da la oportunidad al adulto de comunicarse con él a través de un código común y universal, sean cuales sean las características y condiciones en las que se encuentren.
